Es una conexión anormal entre dos partes del cuerpo, como un órgano o un vaso sanguíneo y otra estructura. Generalmente, las fístulas son el producto de una lesión o cirugía. Las infecciones o inflamaciones también pueden provocar que se forme una fístula.
Información
Las fístulas se pueden presentar en muchas partes del cuerpo. Se pueden formar entre:
- Una arteria y una vena (fístula arteriovenosa)
- Las vías biliares y la superficie de la piel (a causa de una cirugía en la vesícula biliar)
- El Cuello uterino y la vagina
- El cuello y la garganta
- El espacio intracraneal y un seno paranasal
- Los intestinos y la vagina
- El colon o intestino y la superficie del cuerpo, lo que provoca que las heces salgan a través de un orificio diferente al ano (fístula enterocutánea)
- El estómago y la superficie cutánea
- El útero y la cavidad peritoneal (el espacio entre las paredes del abdomen y los órganos internos)
- Una arteria y una vena en los pulmones (provoca que la sangre no obtenga suficiente oxígeno en los pulmones)
- El ombligo y tracto gastrointestinal
La enfermedad de Crohn puede conducir a la formación de fístulas entre dos asas intestinales. Asimismo, una lesión puede llevar a la formación de fístulas entre arterias y venas.
Los tipos de fístulas incluyen:
- Ciegas (están abiertas en un solo extremo, pero conectan a dos estructuras)
- Completas (tienen aberturas tanto adentro como afuera del cuerpo)
- En herradura (conectan el ano a la superficie de la piel después de circundar el recto)
- Incompletas (un tubo desde una estructura interna que se cierra en el otro extremo y no conecta con la piel)